El Mediterráneo: Grecia, Croacia y Malta

A pesar de las cicatrices dejadas por la Segunda Guerra Mundial, La Valeta se enorgullece de sus magníficos palacios, plazas, jardines e iglesias de estilo barroco. El Gran Palacio del Maestro, construido entre 1571 y 1574, es la sede actual del Parlamento maltés y de las oficinas del presidente de Malta.

Una de las islas griegas más exuberantes, Corfú, está rodeada de increíbles aguas azules y tiene apacibles villas emplazadas sobre laderas. Las pintorescas cafeterías de la ciudad de Corfú transmiten una sensación muy continental, pero las ensenadas apartadas y las playas arenosas de la isla solo se pueden encontrar en las islas griegas. ¡Conoce más de Corfú en un crucero por Europa !

A pesar de los magníficos muros del siglo 13 que rodean la ciudad, Dubrovnik es uno de los destinos de crucero más acogedores de toda Europa. Bautizada como "la perla del Adriático" por el poeta Lord Byron, esta ciudad croata irradia un encanto romántico y ofrece hermosos paisajes con sus resplandecientes calles de mármol, edificios de siglos de antigüedad con techos anaranjados brillantes y encantadoras playas flanqueadas por increíbles salientes rocosos. Conoce más de Dubrovnik en un crucero por Europa!

Escondida entre las montañas y la Bahía de Kotor, una de las partes más accidentadas del mar Adriático, encontrarás la pintoresca ciudad de Kotor. Al llegar a esta ciudad apartada notarás el imponente muro de protección de 65 pies de alto, construido en el período veneciano durante el siglo 9. Pasea por el laberinto de calles adoquinadas con cafés acogedores y tiendas de artesanías, y admira los elegantes edificios antiguos. Además de haber sido declarada Patrimonio Histórico y Natural de la Humanidad por la UNESCO, Kotor es reconocida en todo el mundo como uno de los mejores lugares para pasear en yate y navegar en velero.

Esta ciudad mediterránea de la costa este del mar Adriático tiene una larga y nutrida historia que se remonta al increíble Palacio de Diocleciano (hacia el siglo 295 d. C.) en el centro de la ciudad. Split ofrece a los huéspedes del crucero una gran variedad de lugares para visitar, desde la majestuosa catedral y las calles de mármol en el centro de la ciudad hasta el área del puerto con sus paseos llenos de cafés y paisajes de las montañas costeras.

Si paseas por la costa noroeste de Italia encontrarás la ciudad histórica de Ravena. Esta ciudad que supo ser un pujante puerto en la antigüedad (ahora está a cinco millas tierra adentro) también fue el pilar en el extremo occidental del Imperio Bizantino. Al igual que todos los que vienen de visita, tú también quedarás maravillado con los exquisitos mosaicos bizantinos. A primera vista, las calles antiguas, plazas tranquilas y tiendas elegantes se parecen a las de cualquier otra ciudad italiana, pero las cúpulas bizantinas de sus iglesias siguen evocando su legado oriental. Y como un valor agregado, Ravena es un lugar excelente para saborear los deliciosos platos de la región Emilia-Romaña.